Empieza la temporada 2021/2022
¿Simplificarás tu vida deportiva?
A menudo muchos me dicen que no contratan a un entrenador para seguir un plan porque no tienen tiempo. Y que entrenan así por libre porque no pueden tener una rutina más o menos consolidada que les permita tener esa constancia necesaria.
¡Y eso es justamente lo contrario! Cuanto menos tiempo tiene uno, mayor importancia tiene cada minuto dedicado al entrenamiento.
A menudo explico a mis clientes que un plan de entrenamiento es una herramienta y no una condena. Que el plan es un camino para poder alcanzar unos valores de rendimiento que le permitan estar en la línea de salida de cualquier evento deportivo en buenas condiciones, sin estrés y con confianza.
Esa hoja de ruta además, se ha trazado desde la racionalidad y por tanto, la progresión se ha calculado para que el organismo se adapte y reducir así el riesgo de lesiones por sobrecargas.
Viéndolo desde esta perspectiva, seguro que no te parecerá tan descabellado poder contratar un plan de entrenamiento pese a disponer de tiempo limitado en tu apretada agenda. Antes de hacerlo sin embargo, déjame que te aconseje en ciertos aspectos previos a ello.
El primero y más importante, ¿qué calendario de competiciones te gustaría realizar? Plantearse unos objetivos realistas y alcanzables no es sólo una cuestión deportiva sino que tiene trascendencia en todos los aspectos de la vida.
Si vives en Barcelona por ejemplo, no escojas la Copa de España de Esquí de Travesía porque te vas a pasar el día en la carretera.
Si hace años que no haces nada y vienes de un modelo de vida sedentario, un Ironman no sería una buena forma de empezar a entrenar.
Si dispones de 10 horas a la semana, una ultra trail de 100 millas sería un poco justo.
Por ello, siéntate con un calendario delante, marca los eventos importantes tuyos, de tu familia y de tu agenda laboral y trata de pensar en los mejores momentos en que los factores externos te condicionen lo mínimo y seas capaz de disfrutar de la carrera y del entrenamiento para llegar a ella.
El segundo, ¿qué actividades de entrenamiento quieres introducir en tu planificación? ¿Sólo la actividad competitiva o querrás aprovechar las bondades del entrenamiento cruzado para minimizar el riesgo de sobrecargas y lesiones? ¿Qué posibilidades de entorno, infraestructuras y equipamiento dispones para poder hacerlas todas de forma sostenible? ¿En qué momento de la temporada podrás realizarlas?
Todo esto nos permitirá trazar un esbozo global de la temporada, con una organización más racional de lo que tus competiciones exigen y tus posibilidades de entrenamiento para así reducir estrés e incertidumbre.
El tercero y último, ¿Cómo te vas a organizar tu agenda personal? ¿Cuándo es el mejor momento para entrenar en tu día a día? ¿Qué actividades debes compaginar?
Piensa en esto de forma global, no sólo en el ámbito deportivo. Reflexiona pues si eres de tipología Buho (los que están activos por la noche y les cuesta horrores madrugar) o alondra (los que madrugan sin esfuerzo). Piensa en aspectos prácticos relativos al transporte que pueden ofrecerte una buena ocasión para entrenar (y ahorrar dinero en parkings y gasolina a la par que ser más respetuosos con el medio ambiente). Trata de compaginar las actividades extraescolares de tus hijos para sacar ese entrenamiento extra de fuerza o de natación. Y mil posibilidades y oportunidades más que puedes tener para poder entrenar sin que suponga un marcroesfuerzo y poder disfrutar de la actividad física de forma sostenible durante toda la vida.
Hay un proverbio chino que reza que cualquier camino, por largo que sea, empieza por el primer paso. Todo lo dicho anteriormente es justamente el primer paso. Si no lo tienes claro y necesitas ayuda, puedo echarte una mano. Si lo tienes claro y lo que te falta es el plan de entrenamiento, no lo dudes. Los encontrarás en la web y además, personalizables mediante consulta. Añade carreras, cambia el orden del entrenamiento durante la semana y hazlo de forma guiada. ¡No te arrepentirás!